Actualidad de la Familia Diaconal
Mantente al día con lo que vive y comparte la comunidad diaconal en nuestra diócesis: ordenaciones, encuentros, testimonios, formación, vida pastoral y momentos de servicio que nos inspiran.
A veces, el deseo de servir más y mejor a los demás no es solo generosidad: puede ser una llamada. Si sientes que algo dentro ti se mueve cuando ves a otros entregarse por el Evangelio, quizá Dios también te esté llamando.
Detente un momento, reza, escucha… y pregúntate: ¿y si fuera a mí?
El camino hacia el diaconado permanente no es un proyecto solitario, sino una vocación que brota y se reconoce en el seno de la comunidad cristiana. Puede surgir como una inquietud profunda en tu corazón, una llamada que sientes en la oración y en tu vida cotidiana. O tal vez sea tu comunidad, la parroquia o las personas con las que sirves, quienes perciban en ti los signos de una posible vocación al servicio.
En cualquiera de los casos, esta llamada necesita ser contrastada y acompañada. Por eso, es fundamental el apoyo del párroco, que no solo te orientará en el proceso, sino que será quien, en nombre de la comunidad, presente tu candidatura al Arzobispo. Este paso se realiza de forma formal, mediante una carta en la que se expongan las razones de tu solicitud, acompañada de tu historia personal y tu recorrido pastoral. Así comienza un camino de discernimiento compartido, en comunión con la Iglesia.
Mantente al día con lo que vive y comparte la comunidad diaconal en nuestra diócesis: ordenaciones, encuentros, testimonios, formación, vida pastoral y momentos de servicio que nos inspiran.